La obra fue creada por el seminario Diocesano "Jesús Buen Pastor" e incluye un busto de Ceferino entronizado en medio del paisaje agreste. Además se instaló una cruz gigante y con las mismas rocas del lugar se creó un ámbito de regocijo para las celebraciones religiosas.
El padre Juan Giordano manifestó que desde hace tiempo se tenía la idea de crear un lugar así. Recordó que Ceferino Namuncurá era un aborigen que un día se convirtió al cristianismo y que sintió el llamado de Dios para ser sacerdote.
"Lamentablemente no lo pudo lograr porque enfermó gravemente estando en Europa y murió antes de alcanzar el sacerdocio, pero de igual manera consideramos que para todos los seminaristas ha sido un ejemplo de perseverancia y de repuesta a Dios", reflexionó el padre Giordano.
"Lamentablemente no lo pudo lograr porque enfermó gravemente estando en Europa y murió antes de alcanzar el sacerdocio, pero de igual manera consideramos que para todos los seminaristas ha sido un ejemplo de perseverancia y de repuesta a Dios", reflexionó el padre Giordano.
Por su parte, el sacerdote formador Gerardo Meichtri sostuvo que una de las maneras de rendir homenaje al beato Ceferino era así, en un marco agreste simbolizando la naturaleza que siempre rodeó a Ceferino Namuncurá.Meichtri tuvo palabras de gratitud hacia la importante cantidad de fieles de la zona y familiares de los seminaristas que participaron del acto de bendición de la cruz y del monumento a Ceferino, porque es una manera de fortalecer esta marcha hacia la santidad del indiecito de las pampas ya proclamado beato.
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